Octubre 9, 2015
El Nopalero, una muestra de la creatividad de trabajadores de R-100
Ruta Cien
1990
Cuando iniciaron el trabajo no sabían cómo quedaría. Lo cierto es que tenía que ser algo especial, muy bien hecho. No podían fracasar, tanto por orgullo propio como por cumplir con su promesa.
En aproximadamente dos meses, un autobús tipo Convencional que se encontraba entre la chatarra fue convertido por personal del módulo 53 en un flamante camión adaptado para transportar la carga de los horticultores de las zonas de Tláhuac y Milpa Alta. Su nombre: El Nopalero.
Alrededor de 10 personas lograron la transformación del autobús. "Todos los muchachos contribuyeron para la reconstrucción de este camión", comentó orgulloso el señor Vicente Olivares, quien estuvo a cargo del proyecto.
Juan Galicia, responsable del área de carrocería del módulo 53, expresó: "Al principio no sabíamos ni por dónde empezar. Cuando Creíamos haber adelantado, lo mirábamos y la verdad no se notaba. El ánimo a veces decaía, yo trataba de animar a los muchachos... fueron horas de intenso trabajo, pero terminamos, y que se nos haya reconocido nuestro trabajo fue satisfactorio".
Cada uno puso su granito de arena. José Luis Aguilar, Carlos Jiménez, Francisco Salgado, Carlos González y Pedro Pérez trabajaron la carrocería del autobús. Oscar Rodríguez, Pedro Angeles y Horacio Chavira se encargaron de la parte motriz. Teodoro Ibarra y Enrique Alonso se ocuparon de la pintura. Víctor Vargas y Jorge Sosa realizaron la instalación eléctrica. Bernardino Avalos y Mario Suárez trabajaron la fibra de vidrio. Y por último, los señores Emigdio Rodríguez y Jorge Elizalde se encargaron de las llantas del autobús.
El Nopalero cuenta con 6 asientos para dos personas cada uno en su parte delantera. Las dos terceras partes restantes quedaron libres para que los usuarios puedan acomodar sus bultos sin mayor problema. Esta parte está dividida por una puerta, que además de proteger al pasaje sirve como un elemento decorativo. En la parte trasera se clausuró la puerta lateral y se instaló otro más grande en el fondo para facilitar el acceso y que la gente pueda acomodar bien su mercancía.
Una vez más los trabajadores de R-100 demostraron que son capaces de efectuar trabajos especiales de acondicionamiento. Tanto es así, que ya están en proceso de reconstrucción otros dos camiones y se espera que sean cinc en total, afirmaron los orgullosos participantes de este primer camión reconstruido en las instalaciones del módulo 53.
